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Cómo citar este texto: ¿Qué son las Metodologías Activas y cómo utilizarlas? Rodrigo Terra. Publicado el: 12/09/2023. Enlace de la publicación: https://www.es.makerzine.com.br/educacion-general/que-son-las-metodologias-activas-y-como-utilizarlas .

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¿Qué son las metodologías activas?

Las metodologías activas son enfoques de enseñanza que colocan al estudiante en el centro del proceso educativo, involucrándolo activamente en la construcción del conocimiento. A diferencia de los enfoques tradicionales, donde el profesor desempeña un papel central en la transmisión de información, las metodologías activas enfatizan la participación activa de los estudiantes en el aprendizaje.

Estas metodologías alientan a los estudiantes a participar en actividades prácticas, discusiones en grupo, resolución de problemas, proyectos y otras formas de interacción con el contenido. Los estudiantes son desafiados a explorar, analizar, sintetizar y aplicar el conocimiento de manera significativa. El papel del profesor en este contexto es el de facilitador, orientando, apoyando y estimulando el proceso de aprendizaje.

Las metodologías activas valoran la autonomía del estudiante, fomentan el desarrollo de habilidades como el pensamiento crítico, la resolución de problemas, el trabajo en equipo y la comunicación efectiva. Reconocen que cada estudiante tiene su propio ritmo de aprendizaje e intereses, y buscan adaptar las estrategias de enseñanza para satisfacer las necesidades individuales.

Algunos ejemplos de metodologías activas incluyen el aprendizaje basado en proyectos, el aprendizaje colaborativo, el aula invertida, el estudio de caso, la gamificación, entre otros. Cada uno de estos enfoques tiene sus características específicas, pero todos comparten la idea de promover un aprendizaje más comprometido, contextualizado y significativo para los estudiantes.

7 buenas razones para utilizar metodologías activas en el aula

¡Existen varias razones por las cuales las metodologías activas son ampliamente utilizadas en la educación! Aquí tienes solo algunas de ellas:

  1. Participación de los estudiantes: Las metodologías activas fomentan la participación activa de los estudiantes, haciendo que el proceso de aprendizaje sea más atractivo y significativo. Los estudiantes son desafiados a explorar, investigar, colaborar y aplicar el conocimiento en situaciones reales, lo que aumenta su interés y motivación.
  2. Construcción del conocimiento: En lugar de simplemente recibir información de manera pasiva, los estudiantes tienen la oportunidad de construir activamente su propio conocimiento. Se les reta a pensar críticamente, analizar problemas, establecer conexiones y aplicar conceptos en contextos prácticos. Esto promueve un aprendizaje más profundo y duradero.
  3. Desarrollo de habilidades: Las metodologías activas están diseñadas para fomentar el desarrollo de una variedad de habilidades importantes, como el pensamiento crítico, la resolución de problemas, el trabajo en equipo, la comunicación efectiva, la colaboración y la autonomía. Estas habilidades son esenciales para el éxito académico y profesional de los estudiantes.
  4. Aprendizaje colaborativo: Al trabajar en grupos e interactuar con sus compañeros, los estudiantes aprenden a colaborar, escuchar diferentes perspectivas, respetar opiniones divergentes y trabajar en equipo. El aprendizaje colaborativo refuerza las habilidades sociales y fomenta un entorno de apoyo y aprendizaje mutuo.
  5. Contextualización y aplicación del conocimiento: Las metodologías activas permiten a los estudiantes aplicar el conocimiento en situaciones auténticas y relevantes. Esto les ayuda a comprender la utilidad práctica de lo que están aprendiendo y a establecer conexiones con el mundo real. La contextualización del conocimiento hace que el aprendizaje sea más significativo y facilita la transferencia de habilidades a situaciones reales.
  6. Personalización del aprendizaje: Las metodologías activas permiten adaptar el aprendizaje según las necesidades individuales de los estudiantes. Pueden trabajar a su propio ritmo, explorar áreas de interés y recibir apoyo individualizado del profesor. Esto ayuda a atender a las diferentes habilidades, estilos de aprendizaje y niveles de conocimiento de los estudiantes.
  7. Preparación para la vida fuera de la escuela: Las metodologías activas reflejan la necesidad de preparar a los estudiantes para los desafíos del mundo actual, que requiere habilidades de pensamiento crítico, resolución de problemas, colaboración e innovación. Al utilizar estos enfoques, los estudiantes se están preparando para enfrentar de manera más efectiva los desafíos futuros.

Algunas de las principales metodologías activas

Hay varias metodologías activas utilizadas en la educación. He seleccionado solo algunas de las más conocidas:
  1. Aprendizaje Basado en Problemas (ABP): En este enfoque, los estudiantes trabajan en grupos para resolver problemas del mundo real. Identifican lagunas en su conocimiento, formulan preguntas de investigación, buscan información relevante y desarrollan soluciones o respuestas. El profesor actúa como facilitador y proporciona orientación según sea necesario.
  2. Aprendizaje Basado en Proyectos (ABP): En esta metodología, los estudiantes participan en proyectos que requieren la aplicación práctica del conocimiento. Trabajan en grupos para planificar, investigar, colaborar, crear y presentar un producto final. Los proyectos pueden estar relacionados con temas del currículo o problemas sociales, fomentando el desarrollo de habilidades de resolución de problemas y trabajo en equipo de los estudiantes.
  3. Clase Invertida: En este enfoque, los estudiantes estudian los materiales antes de la clase, a través de videos, lecturas o recursos en línea. Durante el tiempo de clase, el profesor se enfoca en actividades prácticas, discusiones en grupo y aclaración de dudas. La clase invertida permite que los estudiantes apliquen el conocimiento de manera más activa y participen en discusiones más profundas.
  4. Aprendizaje Colaborativo: En esta metodología, los estudiantes trabajan juntos en grupos para lograr objetivos comunes. Comparten conocimientos, discuten ideas, resuelven problemas y desarrollan habilidades de comunicación y colaboración. El profesor desempeña el papel de facilitador y apoya el trabajo en equipo.
  5. Estudio de Caso: En este enfoque, los estudiantes analizan casos reales o ficticios que presentan situaciones complejas o problemas por resolver. Exploran diferentes perspectivas, aplican conceptos teóricos y toman decisiones fundamentadas. El estudio de caso fomenta la reflexión crítica, el razonamiento analítico y la aplicación del conocimiento en contextos auténticos.
  6. Gameificación: Esta metodología incorpora elementos de juegos en el aprendizaje, haciendo el proceso más atractivo y motivador. Los estudiantes son desafiados a alcanzar metas, ganar puntos, avanzar de nivel y recibir recompensas a medida que progresan. La gamificación estimula la competencia amigable, la colaboración y la resolución de problemas.

¿Qué necesito para usar metodologías activas en el aula?

Para utilizar metodologías activas en el aula, algunos puntos son esenciales, como:

  1. Planificación: Comienza definiendo los objetivos de aprendizaje e identificando la metodología activa más adecuada para alcanzarlos. Considera los intereses y necesidades de los estudiantes, así como los recursos disponibles.
  2. Preparación de materiales: Prepara los materiales necesarios para la actividad, como casos de estudio, proyectos, recursos en línea o cualquier otro recurso relevante.
  3. Introducción: Presenta la metodología activa a los estudiantes, explicando el propósito y los objetivos de la actividad. Muestra la importancia de su participación activa y enfatiza la relevancia de la colaboración y el trabajo en equipo.
  4. Organización de grupos: Si la actividad requiere trabajo en grupo, organiza a los estudiantes en equipos adecuados, teniendo en cuenta la diversidad de habilidades y conocimientos. Asegúrate de que todos los grupos tengan los recursos y materiales necesarios.
  5. Orientación: Proporciona orientación a los estudiantes, aclarando las expectativas, respondiendo preguntas y brindando apoyo según sea necesario. Está disponible para brindar orientación individualizada a los grupos durante el proceso.
  6. Desarrollo de la actividad: Anima a los estudiantes a involucrarse activamente en la actividad propuesta, ya sea resolviendo problemas, discutiendo ideas, realizando investigaciones, creando proyectos o participando en juegos. Supervisa el progreso de los grupos, formula preguntas para estimular el pensamiento crítico y proporciona retroalimentación adecuada.
  7. Discusión y reflexión: Dedica tiempo a las discusiones en grupo, compartir resultados, analizar errores y reflexionar sobre el proceso de aprendizaje. Anima a los estudiantes a expresar sus opiniones, intercambiar experiencias y aprender unos de otros.
  8. Síntesis y conclusión: Ayuda a los estudiantes a sintetizar el conocimiento adquirido y a establecer conexiones con conceptos previos. Realiza una conclusión que recapitule los puntos clave abordados durante la actividad.

Recuerda que el profesor desempeña el papel de facilitador y mediador durante todo el proceso, estimulando la participación activa de los estudiantes, brindando apoyo, orientación y retroalimentación constructiva. Es importante adaptar las metodologías activas según el contexto y las necesidades de los estudiantes, permitiéndoles ser los protagonistas de su propio aprendizaje.

Referencias bibliográficas

  • Metodologías activas aplicadas a la educación a distancia. Sandra Medeiros Fonseca, João Mattar. Revista EDaPECI, ISSN-e 2176-171X, Vol. 17, N.º 2, 2017, págs. 185-197. Para leer el artículo, haz clic aquí.
  • La práctica de la Metodología Activa: comprensión de los discentes como autores del proceso enseñanza-aprendizaje. Bárbara de Caldas Melo, Geisa Sant’Ana.
    Curso de Enfermería de la Escuela Superior de Ciencias de la Salud / Fundación de Enseñanza e Investigación en Ciencias de la Salud. Brasilia-DF, Brasil. Para leer el artículo, haz clic aquí.
  • Metodología Activa – Aula Invertida y sus Prácticas en la Educación Básica. Zeni Terezinha Gonçalves Pereira, Denise Quaresma da Silva. Centro Universitario La Salle. REICE: Revista Iberoamericana sobre Calidad, Eficacia y Cambio en Educación, ISSN-e 1696-4713, Vol. 16, N.º 4, 2018, págs. 63-78. Para leer el artículo, haz clic aquí.
  • Cambiando la educación con metodologías activas. José Morán. Colección Medios Contemporáneos. Convergencias Mediáticas, Educación y Ciudadanía: aproximaciones juveniles. Vol. II. Para leer el artículo, haz clic aquí.

Rodrigo Terra

He trabajado como profesor de Física y Cultura Maker durante más de 20 años. Soy investigador en Ciencias Educativas con énfasis en Tecnología Educativa y Docencia, desarrollando trabajos de consultoría pedagógica para diversas empresas del sector educativo. Desde hace algunos años, he estado enfocando mis estudios en el mundo de los datos y la programación. Actualmente, trabajo como líder académico en materias técnicas como Data Analytics, Gestión de Productos Digitales y Mercado Financiero. Soy un eterno curioso, apasionado por el café y por una buena conversación. Creo que solo a través de una formación transdisciplinaria podemos crear oportunidades para pensar en diferentes aspectos o puntos de vista sobre un mismo tema y, con ello, desarrollar personas más conscientes y preparadas para la vida.

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